Tras el incendio que asoló Agrestic y quemó su casa, Nancy se traslada junto con su familia a la ciudad de Ren Mar, en la frontera entre San Diego y Tijuana. Ya asentados en su nuevo hogar, Nancy seguirá traficando marihuana entre sus nuevos vecinos y expandiendo sus negocios más allá de las fronteras del país, además de hacerse cargo de una tienda de artículos para bebés. Además de no descuidar sus múltiples trabajos, Nancy tendrá que ocuparse de sus hijos: un adulto Silas que, junto a su nueva novia, organiza un negocio de contrabando paralelo al familiar; y un adolescente Shane que empieza a experimentar el despertar sexual.