En una cafetería, Sonoko y Ran son acusadas de robar unas entradas de un concierto a otro cliente. Al día siguiente, el cliente regresa diciendo que alguien de la cafetería ha publicado su entrada en una página web de subastas. Uno de los empleados no ha venido a trabajar, por lo que Conan, Ran, Sonoko, el cliente y otro empleado decide ir a su apartamento para hablar con ella. Cuando llegan, se encontraron con la puerta abierta, el apartamento todo en mal estado, y la chica... muerta.