Convertido en el Señor de Señores, Ávila tendrá ahora que enfrentar casos aún más complejos. La investigación de la muerte de Erika Duarte, será solo el comienzo de una sorprendente trama de crimen y corrupción. Junto a él permanece Iván, su asesor y mano derecha -aunque nunca haya confiado en él de todo-, Ana y el detective Sánchez.